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Dable: Un futuro eligible.
Dáctilo: Punto y a parte poético.
Dactilografía: El sorfeo de la escritura.
Dactilógrafo, -fa: Maquinista de las letras.
Dactiloscopia: Arte de coleccionar sellos humanos.
Dádiva: Un afecto material.
Dadivoso, -sa: Conducta detallista que suele esconder carencias emocionales.
Dado: El lenguaje del azar.
Dador, -ra: El que tiene.
Dalia: La exuberancia del pétalo.
Dálmata: Una vaca que ladra.
Dalmática: La contradicción de la humildad cristiana.
Daltonismo: La evidencia de la infiable percepción humana.
Dama: El género elevado a estatus social.
Damajuana: 1. La botella de campo. 2. Opulencia rústica.
Damasco: Zona franca de civilizaciones.
Damasquino, -na: Lujo utilitario.
Damisela: El refinamiento de la inocencia.
Damnificado: Los parados.
Damnificar: Hacer sufrir.
Dandi: Un conocido que tengo en mente.
Danés,-sa: Un vikingo moderno.
Dante: El viajero de los infiernos.
Dantesco, -ca: La guerra santa musulmana.
Danza: Coreografía anatómica.
Danzante: El oportunista y el interesado.
Danzar: Liberar el cuerpo.
Dañable: La fragilidad humana.
Dañado, -da: El sistema social.
Dañar: Acción deliberada con el fin de crear disfuncionalidad.
Dañino, -na: La mente hueca.
Daño: La colisión de una idea con la intransigencia.
Dañoso, -sa: Una educación rígida.
Dar: 1. Un acto de generosidad. 2. Transferir una propiedad que la vida nos ha cedido en depósito.
Dardo: Un enfoque con agudeza.
Dársena: El mar en zona de descanso.
Darvinismo: Una teoría incompleta.
Data: La señal cronológica de una singularidad.
Datar: Medir la eternidad.
Dátil: La golosina navideña de mi madre.
Dativo,-va: Una indirecta de la lengua.
Dato: Píldora rellena de información.
De: El susurro de un chivato.
Deambular: Caminar sin brújula.
Deambulatorio: Un hospitalillo.
Debajo: Una posición muy cómoda.
Debate: Duelo de discursos.
Debatir: Eufemismo de monólogo de sordos.
Debe: El saldo negativo del haber.
Deber: La otra cara del derecho.
Debidamente: En los tiempos que corren, casi una excentricidad.
Debido, -da: La razón de la causa.
Débil: El inadaptado.
Debilidad: El comportamiento educado mal entendido.
Debilitar: El hedonismo.
Débito: Una resta social.
Década: Un parpadeo.
Decadencia: El principio del fin de una etapa.
Decadente: La cultura occidental.
Decaer: El cuerpo humano desde que nace.
Decágono: Un círculo facetado.
Decagramo: Un puñado de masa.
Decaído, -da: La vieja Europa.
Decaimiento: La soberbia hormonal en el umbral de la madurez.
Decalitro: Casi un Salmanazar.
Decálogo: Un cinturón social.
Decámetro: El abismo de la cercanía.
Decanato: El club de las relaciones sociales universitarias.
Decano: La alta sociedad facultativa.
Decantación: La equidad de las leyes naturales.
Decantar: Proveer a la carencia.
Decapitación: Segar los valores humanos.
Decapitar: Una monstruosidad.
Decasílabo, -ba: 1. Otorrinolaringólogo. 2. Un tren de sílabas.
Decena: Que lo pueden contar los niños.
Decenario: El rezo como complemento de moda.
Decenas: Premio al segundón.
Decencia: 1. Asignatura pendiente en la educación contemporánea. 2. Antónimo de la competitividad económica.
Decenio: Media vida.
Decentar: Un idealista en política.
Decente: Mis padres.
Decepción: El maestro de la aceptación.
Decepcionante: El ser humano.
Decepcionar: Las expectativas con pies de barro.
Decidido,-da: El valiente o el inconsciente.
Decidir: Eligir.
Decidor,-ra: Un showman.
Decigramo: Un festín insectívoro.
Decilitro: Un culito de vino.
Décima: La distancia que separa la salud de la enfermedad.
Decimal: Los que hacen cola.
Decímetro: Un metro escolar.
Décimo,-ma: La esperanza de ser millonario.
Decimoctavo, -va: La irreversibilidad de la mayoría de edad.
Decimonoveno,-na: El viento juvenil de la libertad.
Decimoquinto, -ta: El florecimiento de la mujer.
Decimosexto,-ta: El pase de discoteca.
Decimotercero, -ra: El adiós a la infancia.
Decir: Un hablar pensado.
Decisión: Las mochilas de la vida.
Decisivo, -va: Toda decisión.
Declamación: 1. Teatralidad. 2. Las ofensas políticas.
Declamar: Dar vida a las palabras escritas.
Declaración: Desnudarse públicamente.
Declaradamente: Mi amor diario por mis seres queridos.
Declarente: Un chismoso de poca sustancia.
Declarar: Reafirmarse en una percepción.
Declararse: Un acto lleno de valentía.
Declinación: Siempre una invitación allí donde no te quieren.
Declinar: Clase de latín en el instituto.
Declieve: El desamor.
Decocción: Una muerte horrible.
Decoración: El arte sin contenido.
Decorado: El paisaje cotidiano.
Decorador, -ra: Un psicólogo ambiental.
Decorar: Hacer casi verdades una mentira.
Decorativo, -va: Algo muy personal.
Decoro: Comportamiento de museo.
Decoroso,-sa: La elegancia de la buena educación.
Decorticar: Capar el cerebro.
Decrecer: La evolución natural de una economía de libre mercado sin control.
Decreciente: La dramatización de la vida a partir de una cierta edad.
Decrépito, -ta: Un casi no-vivo.
Decrepitud: La ley de la mortalidad.
Decretar: Acto de creación.
Decreto: Yo Soy.
Decuplicar: El sueño del avaricioso.
Décuplo, -pla: El valor de un beso espontáneo.
Decurso: El rastro incisivo del tiempo.
Dechado: Los humanistas.
Dedada: Las huellas del crimen.
Dedal: La armadura del dedo.
Dédalo: La propia vida.
Dedicación: 1. La voluntad en acción. 2. Pensar y escribir lo pensado.
Dedicar: Ofrenda del espíritu.
Dedicatoria: Una caricia del alma.
Dedillo: Una antena de la curiosidad.
Dedo: Instrumento de la inteligencia.
Deducción: El resultado de la razón matemática.
Deducir: Una habilidad escasa.
Defecación: Rastro de la maquinaria biológica.
Defecar: La respiración densificada.
Defección: El sello del traidor.
Defecto: Muchos.
Defectuosidad: La belleza del mundo sin estética en sus formas.
Defectuoso, -sa: El hombre sin madurar.
Defender: Acto reflejo de no ceder el poder personal a terceros.
Defensa: Proteger la autoridad interna.
Defensivo,-va: El cobarde.
Defensor, -ra: Persona expansiva.
Deferencia: Guiño formal.
Deferente: En exceso, un súbdito.
Deferir: Ceder la soberanía individual.
Deficiencia: El sistema de Bienestar Social.
Deficiente: Persona con carencias emocionales y/o intelectuales.
Déficit: Cualquier aspecto a trabajar personalmente.
Definición: Un esbozo de la realidad.
Definido, -da: La fina línea que separa la vida de la muerte.
Definidor,-ra: Censurador del régimen.
Definir: Reinterpretar, repercibir.
Definitivo,-va: El ahora.
Deflagración: El erotismo.
Deformación: Cualquier especialización respecto al resto del mundo.
Deformar: Redefinir la realidad.
Deforme: El opulento.
Deformidad: Efecto por exceso.
Defraudación: El mercado laboral.
Defraudador, -ra: El político.
Deufradar: La lección de las expectativas rígidas.
Defuera: El origen de todos los males de los ególatras.
Defunción: El último acto en escena.
Degeneración: El confort ocioso.
Degenerado, -da: Los animales medio seres humanos.
Degenerar: La memoria.
Deglución: Esclavizarse para conseguir la libertad.
Deglutir: Alimentarse sin amor a la comida.
Degollación: Los recortes sociales.
Degolladero: Los colegios electorales.
Degollar: Separar la mente del corazón.
Degollina: Las leyes de parte.
Degradación: El horizonte de un futuro sin dignidad personal.
Degradante: Trabajar sin poder vivir.
Degradar: Imposición de la productividad selectiva.
Degustación: Comer sin comer.
Dehesa: El reino de los cielos en la tierra del ganado.
Dehiscencia: El empuje de la vida.
Deicida: Una persona mentalmente fuerte.
Deidad: El flujo mágico de la vida.
Deificar: 1. El germen del fundamentalismo. 2. La necesidad de la mente débil. 3. Respeto por lo trascendente.
Deífico,-ca: Pura especulación irrelevante.
Deísmo: 1. Una teoría indemostrable. 2. Creencia cierta y no cierta a la vez.
Dejación: Un acto de irresponsabilidad.
Dejadez: El hábito del vicio de la vagancia.
Dejado,-da: El conformista.
Dejamiento: El cumplimiento de los derechos fundamentales de la persona frente a los intereses del Mercado.
Dejar: Permitir el flujo.
Dejo: El regusto del después.
Del: La economía de la lengua.
Delación: El desequilibrio social.
Delantal: El olor a hogar.
Delante: La posición del desgaste.
Delantera: La presentación de las formas.
Delantero: La gloria insolidaria.
Delatar: Correr la cortina.
Delator, -ra: Un dado de tres caras: Integridad, miedo y codicia.
Deleble: La historia de toda una vida de un hombre.
Delectación: Estar en compañía de quien uno quiere.
Delegación: Un control incontrolable.
Delegado, -da: Un súbdito leal.
Delegar: Soltar cuerda.
Deleitable: Una muestra de respeto mútuo.
Deleitar: El arte de la sociabilidad.
Deleite: Mi mujer y mis hijas.
Deletéreo,-ra: La productividad y el poder.
Deletrear: Hablar bajo revoluciones.
Deletreo: Diseccionamiento de las palabras.
Deleznable: El traidor a la confianza y el mal agradecido
Delfín: El relaciones públicas del mar.
Delgadez: Una obsesión moderna.
Delgado, -da: La antítesis del buen gourmet.
Delgaducho,-cha: Una triste vida.
Deliberación: Una reflexión reflexiva.
Deliberar: El punto medio de la justicia.
Delicadeza: El gesto de un cachorro.
Delicado,-da: La paz social.
Delicia: Dormir sin despertador.
Delicioso, -sa: Un buen pedazo de gorgonzola con una exquista copa de vino.
Delictivo,-va: La cesión de gobierno de los Estados a los Mercados.
Delicuescente: La moral trasnochada.
Delimitación: La frontera de la diferencia.
Delimitar: Cribar.
Delincuencia: La necesidad proactiva.
Delincuente: El usurero legal.
Delineante: Un dibujante espacial.
Delinear: Expropiar el vacio.
Delinquir: Profanar el respeto.
Deliquio: Un desempleado de larga duración.
Delirante: La brecha de prioridades entre política y ciudadanos.
Delirar: El comportmiento del ambicioso.
Delirio: Llegar a final de mes por parte de millones de personas.
Delito: Ser padres sin consciencia.
Delta: El pubis del río.
Deltoides: La polea del brazo.
Demacrado,-da: El maquillaje del infortunio.
Demagogia: La cultura del éxito de la sociedad.
Demagogo: Los ricos por rentas.
Demanda: Exigencia con rango de ley.
Demandar: 1. El ocio de los incultos. 2. La justicia reglada.
Demarcación: Una parte divisoria de un total.
Demarcar: El celo por los límites de la propiedad.
Demás: Todo lo otro.
Demasía: La tontería humana.
Demasiado, -da: La relatividad de lo insuficiente.
Demencia: Un mal común.
Demente: La velocidad con la que cambia y se transforma la sociedad.
Demérito: La mayoría de concejales.
Demiurgo: La man que mece el Big Bang.
Democracia: Una casa eternamente en obras.
Demócrata: El que respeta la Democracia, que ya es mucho decir.
Democrático, -ca: La voluntad instruida.
Democratizar: El sentido de libertad de las nuevas generaciones.
Demografía: El factor intangible de la riqueza de un país.
Demográfico,-ca: Un estado de cosciencia colectiva.
Demoledor,-ra: 1. La ausencia de la gestión del fracaso en las Facultades. 2. Una sociedad sin educación en gestión emocional.
Demoler: 1. La intolerancia. 2. Un sistema sin equidad social.
Demolición: Reinventar el contexto.
Demoníaco,-ca: El egoísmo ultraliberal.
Demonio: Una estampita del mal humano.
Demontre: Un trabajador sin trabajo.
Demora: Falta de previsión.
Demorar: Un hábito censurable.
Demostrable: La estupidez humana.
Demostración: Verificar la realidad.
Demostrar: Un método de enseñanza en desuso.
Demostrativo, -va: Una señal discursiva.
Demudar: Empujar a alguien por la fuerza de su zona de confort.
Denario: La arqueología del dinero.
Denegación: Manifestación de poder.
Denegar: Cuando el no es no.
Denigrante: La falta de dignidad personal.
Denigrar: El arma preferida de los mediocres.
Denodado,-da: El ratón frente al gato.
Denominación: Carnet de identificación.
Denominador,-ra: Una profesión, si existiese, divertida.
Denominar: Etiquetar.
Denostar: El proceder de los despreciables.
Denotar: Señal indicativa luminiscente.
Densidad: El peso del volumen.
Denso,-sa: Un acto social sobresaturado de superficialidad.
Dentado, -da: El sueño de los ancianos.
Dentadura: La estética de la sonrisa.
Dentar: El anuncio infantil de la naturaleza de la vida.
Dentellada: Resquicios del instinto animal.
Dentera: El chirrio atacando los dientes.
Dentrífico,-ca: La crema de masaje de la dentadura.
Dentista: 1. Cuanto más lejos, mejor. 2. La usura de la necesidad.
Dentro: Ocupar un espacio.
Denudar: La Filosofía.
Denuedo: Ducharse con agua fría.
Denuesto: Incontinencia de los trogloditas contemporáneos.
Denuncia: La atención sobre una incorrección.
Denunciador,-ra: Un subrayador de hechos.
Denunciar: Comprometerse con lo señalado.
Deparar: No apto para los carentes de atención.
Departamento: Un piso con edad juvenil.
Departir: La cortesía de la conversación.
Depauperar: El estado fisiológico de la clase media en época de crisis.
Dependencia: En según que grados, una tomadura de pelo.
Depender: Los unos de los otros.
Dependiente: Relación natural del hombre social.
Depilación: Desnudar la piel.
Depilar: Aparentar menos animal.
Deplorable: La falta de coraje de muchas personas.
Deplorar: La discriminación laboral de los mayores de 40 años.
Deponente: El que pone, porque tiene.
Deponer: De discutir con un tonto.
Deportación: Flujo poblacional forzado contra voluntad.
Deportado,-da: Persona privada de movimientos propios.
Deportar: Aislar.
Deporte: Sobrevalorado.
Deportividad: Un valor social a promover.
Deportivo,-va: En muchos casos, un adicto al culto al cuerpo.
Deposición: 1. El omega de la comida. 2. La humanización de príncipes y princesas.
Depositar: Reseva de un espacio con fecha de caducidad.
Depositario, -ria: La responsabilidad del guardián.
Depósito: 1. Todo aquello que se ahoga. 2. Un atrapa bajodensidades. 3. La cárcel de las cosas.
Depravación: La antinatura manifiesta.
Depravado,-da: Un ser que no tiene cabida en la sociedad.
Depravar: La cultura del sexo mal entendido.
Deprecación: Arrodillarse.
Depreciar: Acción continua que ejerce el Mercado contra la vida digna de los más desfavorecidos.
Depredación: El primer mundo sobre el segundo y tercer mundo.
Depredador,-ra: Un capitalista ultraliberal.
Depredar: Método de enriquecimiento.
Depresión: La fiebre de la impotencia.
Depresivo,-va: Malfuncionamiento del cerebro.
Deprimente: Tantas conductas humanas...
Deprimir: Trabajar sin poder susbsistir.
Depuración: Necesaria en múltiples niveles de la sociedad.
Depurar: Sanear lo aun salvable.
Depurativo,-va: El amor.
Derecha: 1. En política, no saben dónde están. 2. Inclinación natural de la escritura occidental.
Derecho,-cha: 1. Siempre va detrás de las necesidades sociales. 2. Corporeidad del orgullo.
Deriva: Los pensamientos sin dirección. El argumento de un parlanchín.
Derivación: Una singularidad en el infinito de la causalidad.
Derivada: 1. La tendencia al límite de las matemáticas. 2. Que es engendrado.
Derivar: La respuesta del efecto.
Derivativo, -va: La sonrisa tras el beso.
Dermatología: El abrazo cariñoso de la medicina.
Dermis: Los cimientos del tacto.
Derogación: Condenar un norma a la guillotina de la plaza pública.
Derogar: Acción propia de los cortos de mira de neutralizar una ley cada cuatro años.
Derramamiento: Conquistar superficie.
Derramar: Ejercicio de aprendizaje motor de los bebés.
Derrame: De relativa relevancia, dependiendo del contenido.
Derredor: Un corsé de espacio.
Derrengar: Un acto inhumano, se mire por donde se mire.
Derretimiento: Yo, con estas calores.
Derretir: Bella forma de transmutarse la vela.
Derribar: Sin lugar a dudas, el radicalismo.
Derribo: Cada día, la sombra de la apatía.
Derrocar: Cuanta más injusticia, mejor.
Derrochador, -ra: El/la inconsciente de la finitud de las cosas.
Derrochar: Si es talento, cabe aplaudirlo.
Derroche: Por favor, que sea de cortesía.
Derrota: Un punto y seguido en el camino continuo.
Derrotado, -da: Un estado mental.
Derrotar: Si no se trata de la ignorancia, no me interesa.
Derrotero: El hilo dorado del destino.
Derruir: Redecorar la cotidianidad.
Derrumbadero: La faceta malcarada de la montaña.
Derrumbamiento: A pedazos, nuestra realidad.
Derrumbar: El egoísmo exacerbado.
Desabor: La peor de las muertes en vida.
Desaborido,-da: La cháchara de sociedad.
Desabotonar: Efecto natural físico producido progresivamente por la curva de la felicidad.
Desabrido, -da: Personalmente, el vinagre.
Desabrigado, -da: Cualquier alma en pena.
Desabrigar: El niño solo en su primer día de colegio.
Desabrochar: Si es por pasión, a mordiscos si hace falta.
Desacatar: Siempre que atente contra la ética.
Desacato: La crónica de una consecuencia anunciada.
Desacertar: La cómica costumbre de los sondeos electorales.
Desacierto: 1. El típico graciosillo de las fiestas. 2. Nota disonante.
Desaconsejar: Un consejo que raras veces se atiende.
Desacordar: La esencia del divorcio.
Desacorde: Un tercio de la humanidad con otro tercio, y un tercer tercio con los anteriores.
Desacostumbrar: Para los animales de costumbre, como los seres humanos, un problema.
Desacreditar: El deporte nacional de los envidiosos.
Desacuerdo: Al final todo se reduce a una cuestión de compatibilidades químicas.
Desafección: El efecto de un defraude continuo.
Desafecto, -ta: Un afecto descuidado.
Desafiador, -ra: Rasgo conductual de aquel que no se integra.
Desafiar: La razón al sentimiento, y a la inversa.
Desafinado, -da: Mi engranaje neuronal a primera hora de la mañana.
Desafinar: Estado previo a la armonía.
Desafío: Asombrarse a cada nuevo día.
Desaforado, -da: Todos aquellos que pagamos los sueldos de los aforados.
Desafortunado, -da: La materialización de una vibración energética inadecuada.
Desafuero: Acción propia de enajenados.
Desagradable: Los griteríos.
Desagradar: La leche.
Desagradecer: La rubrica para el último favor concedido.
Desagradecido, -da: Epidemia contemporánea fruto de una mala educación.
Desagradecimiento: Un silencio que retrata.
Desagrado: La falta de pulcritud.
Desagraviar: La ilusión de intentar borrar un pasado.
Desagregar: Provocar una mitosis a la fuerza.
Desaguadero: El tobogán de la lluvia.
Desaguar: Cada vez que bebemos agua.
Desagüe: Medio de desahogo.
Desaguisado: La mano sin vocación.
Desahogado, -da: Persona que llega al clímax del relax.
Desahogar: Cubrir las necesidades fisiológicas más básicas.
Desahogo: Sacar el tapón interior.
Desahuciar: Desproveer a la persona de su dignidad.
Desahucio: Un delito legal.
Desarirado, -da: Los políticos tras su examen de gobernanza.
Desairar: En algunas ocasiones, un necesario acto de salud emocional.
Desaire: La actitud de los políticos frente las necesidades sociales.
Desalado, -da: El peso de la autoaflición.
Desalar: El peligro de quitarle la sal a la vida.
Desalentar: Las noticias respecto a la fe en la humanidad.
Desalfombrar: Hábito de mi suegra cuando llega el verano.
Desaliento: Quedarse lejos, económicamente, de final de mes.
Desaliñado, -da: 1. Los mal entendidos progres. 2. Estética nefasta de los nuevos estudiantes de filosofía.
Desaliñar: A menudo, el desgaste mismo de la vida.
Desaliño: Sin lugar a dudas un claro síntoma de baja autoestima.
Desalmado,-da: Hijos de la oscuridad.
Desalojar: Reparto de fichas.
Desalquilar: Encajar una pieza del puzzle.
Desamoblar: La trashumancia humana moderna.
Desamodorrar: Una buena taza de café.
Desamor: Un final sin felicidad.
Desamortización: Un atajo para el robo de la propiedad privada.
Desamortizar: Cambiar de dueño bajo un nuevo concepto de libertad al uso.
Desamparado,-da: El pobre.
Desamparar: Una acción corregible socialmente.
Desamparo: Espacio de indefensión.
Desandar: Retroceso necesario para volver a tomar impulso para proyectarse hacia delante.
Desangrar: 1. El color de la barbarie. 2. El último grito vital de la muerte.
Desanidar: La ilusión necesaria de quererse comer el mundo.
Desanimación: Desalineación entre sistema educativo y mercado laboral.
Desanimar: La esperanza irracional.
Desánimo: Vistas del pozo interior.
Desanudar: Imposible si es Gordiano.
Desapacible: La persistencia de los extremos.
Desaparecer: Siempre es una buena opción.
Desaparejar: 1. La lujuria animal incontenida. 2. La búsqueda de la dualidad en la unidad.
Desaparición: Un cambio de pantalla sin instrucciones.
Desapasionadamente: El daño colateral de priorizar el dinero sobre la vocación.
Desapegar: Despejar el camino hacia el futuro.
Desapego: Método terapéutico de gestión del fracaso.
Desapercibido: El dolor ajeno en una sociedad hedonista.
Desapiadado,-da: 1.Toda persona egoísta. 2. Efecto producido por el aislamiento de la cúpula de confort.
Desaplicado,-da: Los gobernantes.
Desaprender: El camino para la innovación disruptiva.
Desaprensión: La norma conductual social por excelencia.
Desaprensivo, -va: El ciudadano de a pie frente a una situación que pone a examen su egoísmo.
Desapretar: Recurso educativo.
Desaprobación: Las incongruencias humanas que llevan a la injusticia social.
Desaprobar: 1. Tantas cosas que no acabaríamos. 2. Todo aquello contrario a las ideas arquetípicas.
Desapropiarse: 1. Redistribuir. 2. En algunos casos, consciencia de la no-pertenencia sobre una malentendida posesión.
Desaprovechado, -da: El talento de millones de personas.
Desaprovechar: Efecto de la ceguera.
Desarbolar: Una triste escena.
Desarmar: Medida necesaria para asegurar la seguridad ciudadana.
Desarme: A nivel de Estados, una utopía mientras el hombre sea hombre.
Desarraigar: El alimento de la globalización.
Desarraigo: Un fenómeno antinatural.
Desarrapado, -da: La estética de la carencia.
Desarreglado, -da: Un pose antisistema.
Desarreglar: La mano del incompetente.
Desarreglo: Un problema con solución.
Desarrendar: 1. Desfocalizarse de un suelo. 2. Modificar el enfoque de la energía personal.
Desarrimar: Resultado del curso singular de la vida.
Desarrollar: Materializar una idea.
Desarrollo: Un método para la consecución de las formas.
Desarropar: Impulso pasional.
Desarrugar: Una de mis manías personales.
Desarticular: Obsesión del capitalismo liberal sobre el Humanismo.
Desarzonar: Apear abruptamente.
Desaseado, -da: Reflejo de un malfuncionamiento mental.
Desaseo: Falta de parámetros educativos.
Desasimiento: Renuncia personal a los sueños.
Desasir: Desistir de poseer por respeto o por frustración.
Desasnar: Civilizar.
Desasosegado, -da: Síntoma de tensión entre ser y hacer.
Desasosegar: Motivar la pérdida del in medio virtus.
Desasosiego: Dictadura mental.
Desastrado,-da: Reflejo del mundo interior.
Desastre: La imposición del Principio de Realidad.
Desastroso,-sa: Persona falta de preparación.
Desatadura: Ley de Vida.
Desatar: Un acto de madura inteligencia.
Desatascar: El Tiempo.
Desataviar: Volver a la cotidianidad.
Desatención: El anuncio de una consecuencia impredecible.
Desatender: Dejar perder algo.
Desatento,-ta: Búsqueda de interés en otra parte.
Desatinado, -da: Persona que vive en el mundo perdida de sí misma.
Desatinar: Alteración errónea de la conciencia de la realidad.
Desatino: Actuar fuera del centro de gravedad de una situación o circunstancia.
Desatollar: Esfuerzo yermo de la comunidad internacional.
Desatracar: Perseguir el aliento de la libertad.
Desatrancar: Asomarse fuera de la caja.
Desautorizar: Imponer la autoridad.
Desavenencia: Choque de realidades diferentes.
Desavenido, -da: Existencia paralela sin posibilidad de convergir.
Desayunarse: Ir a destiempo.
Desayuno: Si no hay café, no es desayuno.
Desazón: Un duro golpe de la vida.
Desazonado,-da: Cuadro emocional sufrido por demasiadas personas en este mundo.
Desazonar: Tan triste como comerse una tortilla sin sal.
Desbancar: La fuerza motriz de la historia de la humanidad.
Desbandada: El éxodo de los urbanitas cuando el calor del verano derrite el asfalto de las ciudades.
Desbandarse: El movimiento caótico del orden.
Desbarajustar: Falta de un liderazgo claro.
Desbarajuste: Las prioridades de los movimientos sociales.
Desbaratar: El mandato político respecto a los compromisos electorales.
Desbarate: El balance actual del Estado de Bienestar Social.
Desbarrar: La imperiosa necesidad de una educación basada en la Razón.
Desbastar: Embellecer la vida.
Desbocar: La primera acción del ser humano.
Desbordamiento: Transgredir los límites.
Desbordar: Crecerse.
Desbravar: Amansar el mordisco en beso.
Desbridar: Comienza el festín.
Desbrozar: Tratamiento cosmético de rejuvenecimiento del jardín.
Desbrozo: Los restos vegetales del peeling.
Desbullar: Un hurto con fuerza bruta, no exenta de un alto riesgo para la integridad del asaltante.
Descabalgar: 1. Tocar de pies a tierra. 2. Retomar la unidad de medida humana.
Descabellado, -da: Los milagros de la vida.
Descabellar: El fin del sufrimiento.
Descabezar: Nunca es necesario, a no ser que se trate de Medusa.
Descalabrar: Práctica común del Mercado.
Descalabro: Caerse fuera del espacio de confort.
Descalificar: Deporte nacional.
Descalzar: Juego erótico.
Descalzo, -za: Sentir la libertad bajo los pies.
Descamación: La erosión natural del tiempo sobre la fragilidad humana.
Descaminado,-da: Volver al origen por fuerza gravitatoria.
Descamisar: Desinhibir lo inhibido.
Descamisado, -da: Un pose de statuts.
Descampado, -da: La libertad del espacio.
Descansadero: Un lugar indeterminado donde fumar mi pipa.
Descansar: Un imperativo de la edad.
Descansillo: Un labore interruptus.
Descanso: La utopía del encefalograma plano.
Descantear: Educar a los hijos.
Descantillar: Dinámica del vivir.
Descarado, -da: La humildad socrática.
Descararse: La naturaleza del filósofo.
Descarga: El acto de escribir lo reflexionado.
Descargadero: Mi Vademécum del Ser Humano.
Descargar: Vaciarse para volver a llenarse.
Descargo: Concluir.
Descarnado, -da: Un trabajador que no llega a fin de mes.
Descarnar: Mecánica del Capitalismo antihumanista.
Descaro: La Moral sobre la moralina.
Descarriar: La acción ciega de la educación reglada contra el talento individual.
Descarrilamiento: El progreso sin humanismo.
Descarrilar: Efecto de la enajenación personal o colectiva.
Descarrío: Un hombre sin sentido en la vida.
Descartar: De la vida, todo aquello que no interesa.
Descarte: Un hábito de higiene psicoemocional.
Descasar: Separar la consciencia de la razón.
Descascarar: Desnudar lo substancial.
Descascarillar: Vivir los objetos.
Descastado,-da: 1. Vagabundo emocional. 2. Fantasma de un linaje.
Descastellanizar: La política cultural de inmersión lingüística del Gobierno de Cataluña.
Descatalanizar: La política supremacista de imposición del Gobierno nacionalista de Cataluña contra los catalanes no independentistas.
Descendencia: Una responsabilidad.
Descendente: La paradoja de la ascendencia temporal.
Descender: Si no es por caída libre, circunstancia habituable.
Descendiente: La huella latente de la carga psicoemocional de los antepasados.
Descenso: El amor celoso de la gravedad.
Descentralizar: El deseo de integración del perímetro.
Descentrar: 1. Quitar protagonismo. 2. Un guiño estético.
Desceñir: Respirar.
Descerrajar: Doblegar la voluntad.
Descifrable: El deseo humano.
Descifrar: Poner atención.
Desclavar: Capacidad del hombre de separar aquello que el mismo hombre unió.
Descocado, -da: Mayoritariamente, los pretenciosos.
Descocar: Un árbol sometido a una limpieza cosmética.
Descoco: Propio de los niños mal criados.
Descolgar: Recuperar de la pared de la apatía.
Descolocar: La malicia de la naturaleza humana.
Descoloramiento: La vida en proceso de oxidación.
Descolorar: La Política y el Mercado.
Descolorido,-da: El arcoiris de los sueños.
Descollar: El objeto de la envidia para los mediocres.
Descomedido, -da: La concentración de la riqueza en una minoría.
Descomedirse: 1. El signo de la ira. 2. La sociabilización de la incultura.
Descomponer: La máxima ejecutiva del divide y vencerás.
Descomposición: La carencia de inmunidad carnal.
Descompostura: El hombre animalizado.
Descompuesto: Yo ante la irracionalidad normalizada.
Descomunal: El vacío del Universo.
Desconcertante: La naturaleza humana.
Desconcertar: La posibilidad de una guerra inmediata.
Desconcierto: La actividad política frente a las necesidades sociales de sus conciudadanos.
Desconchar: La firma del tiempo y de la pobreza.
Desconectar: 1. Yo, ahora, con mi Diccionario del Alma. 2. Un lujo en un mundo hiperconectado.
Desconfiado, -da: Servidor frente a la Ley del Secreto.
Desconfianza: La cultura doblegada a la prueba concluyente del instinto.
Desconfiar: El éxito de la división social.
Descongestionar: El imperativo pendular de la congestión.
Desconjuntado,-da: Una percepción relativa al observador.
Desconocer: La verdad de la ilusión del conocimiento humano.
Desconocido, -da: Sinceramente, alguien a quien no me interesa mucho conocer.
Desconocimiento: El estado natural del ser humano.
Desconsideración: El Mercado ante la exuberancia de los talentos individuales.
Desconsiderado,-da: Un arrogante sociabilizado.
Desconsolado,-da: La herencia emocional de la fuerza de la tragedia.
Desconsolador,-ra: El sufrimiento injusto.
Desconsuelo: Cualquier programa de informativos.
Descontar: Los días, las semanas, los meses y los años vividos.
Descontentadizo, -za: Persona mal criada.
Descontentar: El giro imprevisto de una persona querida.
Descontento, -ta: Yo, con mi faceta laboral.
Desconvenir: El punto de desencuentro de los determinismos culturales.
Descorozamiento: Derecho a reivindicar en la era de la dictadura de la felicidad.
Descorazonar: La ineptitud de nuestros gobernantes.
Descorchar: El ruido de la alegría.
Descordar: El descanso del guerreo.
Descornar: El esfuerzo sin premio.
Descorrer: El anhelo de la vejez.
Descortés: Un email sin respuesta.
Descortesía: La normalidad de un mal hábito común en nuestra sociedad.
Descortezar: Conocerse a sí mismo.
Descoser: Cambiar la necesidad de lo cosido.
Descosido,-da: La huella del uso.
Descostrar: Borrar la herida.
Descoyuntamiento: Traspasar el punto crítico.
Descrédito: Las religiones.
Descreer: Efecto producido por la luz del conocimiento racional.
Descreído, -da: A partes iguales, el ignorante y el sabelotodo.
Describir: Un arte al alcance de pocos.
Descripción: Viajar sin moverse.
Descriptivo, -va: Un codex iuris.
Descriptor,-ra: Sin lugar a dudas, Arturo Pérez-Reverte.
Descrismar: Un joven buscando su futuro.
Descristianizar: Acción causada por el hábito conductual de los cristianos.
Descuadernar: Un acto de barbarie.
Descuajar: La solidaridad social.
Descuaje: La vida arrancando de raíz la ilusión de los hombres.
Descuartizar: El principio animal de la gastronomía.
Descubierta: La frágil mortalidad .
Descubierto, -ta: Levantar públicamente un velo.
Descubridor, -ra: Un visionario o un pionero.
Descubrimiento: Una singularidad de la curiosidad.
Descubrir: Forjar la experiencia.
Descuento: Levantarse cada mañana.
Descuidado, -da: Los agujeros negros de la atención.
Descuidar: La seguridad falsa.
Descuido: Una característica humana que escapa al entendimiento de los seres artificiales.
Desde: El punto y seguido del flujo continuo de la vida.
Desdecir: El poso del café.
Desdén: La diferencia entre habilidades sociales y empatía.
Desdentado, -da: 1. La quiebra del Ratoncito Pérez SA. 2. La marca de error en el sistema del Estado de Bienestar Social.
Desdentar: Un tránsito carnívoro.
Desdeñar: Parte de la lógica del tetris existencial.
Desdeñoso, -sa: Una compañía insoportable.
Desdibujado, -da: El profesional sin profesión.
Desdibujarse: Fase inicial del proceso de reinventarse.
Desdicha: La cara amarga de las Moiras.
Desdichado, -da: La carga significativa por oposición del exitoso en un mundo dual.
Desdoblar: Redimensionar el espacio.
Desdorar: Arma de la envidia y la mezquindad.
Desdoro: Una mancha con huella perecedera.
Deseable: El efecto de la excitación.
Desear: Vivir.
Desecar: El sol tras la lluvia.
Desechar: Imperativo necesario para la higiene mental, emocional y ambiental.
Desecho: El principio del reciclaje.
Desedificar: La incoherencia manifestada.
Desellar: Acceder con fuerza mediante.
Desembalar: Liberar.
Desembaldosar: Arrancar la piel de la pared.
Desembarazado, -da: La reconquista del vacío.
Desembarazar: Priorizar la armonía.
Desembarazo: La práctica de un don en su hábitat natural.
Desembarcadero: La frontera entre dos mundos.
Desembarcar: El origen del destino.
Desembarco: El germen de toda colonización.
Desembarque: La primera página de un nuevo relato.
Desembarrancar: Proseguir el camino.
Desembocadura: La falacia de alcanzar el horizonte.
Desembocar: La respuesta a toda acción.
Desembolsar: Fenomenología de la redistribución.
Desembolso: Empobrecimiento debido.
Desembotar: Mis cafés matinales.
Desembozar: La razón del olvido.
Desembragar: El descanso de todo guerrero.
Desembridar: Desculturalizar a un animal.
Desembrollar: Un hábito normalizado en una política contemporánea embrollada.
Desembuchar: El efecto del in vino veritas.
Desemejanza: La diversión de la diferencia.
Desempachar: Desconectarse de las redes sociales.
Desempacho: La naturaleza del comerciante.
Desempañar: La intencionalidad de ver.
Desempapelar: Un acto de justicia con retraso.
Desempaquetar: La ilusión en acción.
Desemparejar: Herir físicamente un corazón.
Desempatar: La azarosa línea entre el fracaso y el éxito.
Desempeñar: Jugar un rol en el gran teatro de la vida.
Desempeño: Una pieza del engranaje.
Desempleo: 1. Una realidad dolorosa. 2. Situación que atenta contra la dignidad humana.
Desempolvar: Los sueños de juventud.
Desempotrar: Ciertas creencias de mi mente.
Desenamorar: 1. Evolucionar por senderos diferentes. 2. Negligencia emocional.
Desencadenar: La mecánica natural del flujo de la vida.
Desencajar: Un estereotipo de su realidad.
Desencallar: Los estados de desánimo.
Desencaminar: Descaro flagrante de la cultura hedonista sobre los valores humanistas.
Desencantar: Las noticias de los telediarios.
Desencanto: Epidemia global en un mundo globalizado.
Desencapotar: Imposible en una sociedad sobresaturada de información no verificada.
Desencaprichar: La fuerza de gravedad del principio de realidad.
Desencargar: Los roles profesionales a los mayores de 45 años.
Desenclavar: Movilidad geográfica por necesidad.
Desencoger: Siempre, la falta de autoestima.
Desencolar: La educación inhibidora.
Desencolerizar: Responsabilidad urgente de los políticos sobre una sociedad desamparada.
Desencordar: Quitar la voz.
Desencuadernar: Un horror.
Desencuadrar: La inteligencia diferente dentro del marco de la inteligencia estandar.
Desenfadadamente: Desdramatizar la vida.
Desenfadado, -da: Cualquiera en el Caribe.
Desenfadar: Médico emocional.
Desenfado: Estado de paz interior.
Desenfocar: Requisito indispensable para poder ver más allá de la caja.
Desenfrenado, -da: El cambio climático.
Desenfrenar: Posición de velocidad vital.
Desenfreno: La política sin control ciudadano, el mercado sin control político, y el ciudadano sin control legal.
Desenfurecer: Suminístrese comida y ocio a partes por igual.
Desenganchar: (-se) Un acto solo apto para valientes.
Desengañar: La responsabilidad moral de los educadores.
Desengaño: El coste del conocimiento.
Desengrasar: La inspección técnica corporal periódica de los adultos.
Desenjabonar: El preludio de un final.
Desenlace: 1. El verdadero clímax de un libro. 2. La singularidad de toda historia humana.
Desenlazar: La respiración contenida de la ilusión.
Desenmarañar: Poner luz.
Desenmascarar: Una cuestión de tiempo.
Desenmohecer: Cambiar de armario.
Desenojar: El poder de la sonrisa de los seres queridos.
Desenredar: Habilidad de mentes analíticas y espaciales.
Desenrollar: Transmutar la geometría.
Desenronquecer: El deseo de muchos matrimonios.
Desenroscar: Dar espacio de movimiento.
Desensartar: Dividir un conjunto.
Desenseñar: Las modas superficiales.
Desentenderse: Comportamiento común de las sociedades modernas.
Desenterrar: 1. Conducta maquiavélica. 2. Aflorar el pasado, con independencia de su intencionalidad.
Desentonar: Toda generación frente a su sucesora.
Desentono: La diferencia mal disimulada.
Desentorpecer: Las preguntas sinceras y directas de los niños sobre los problemas del mundo.
Desentrañar: En algunas materias, una empresa imposible.
Desentumecer: Un ejercicio de fuerza de voluntad.
Desenvainar: Una manera sencilla de solucionar problemas.
Desenvoltura: La exquisitez de la práctica.
Desenvolver: La metamorfosis de una idea a una forma.
Desenvuelto, -ta: Cualquier ser en su medio natural.
Desenzarzar: Un asunto puntiagudo.
Deseo: Sentimiento entroncado en el adn del instinto de supervivencia y de superación.
Deseoso, -sa: Un anhelo sometido a altas temperaturas.
Desequilibrado, -da: Se cuentan por millares.
Desequilibrar: La sociedad de consumo.
Desequilibrio: La relación entre la riqueza y la pobreza.
Deserción: Un término relativo según el observador.
Desertar: Imponer la autoridad interna sobre el poder de terceros.
Desertor: Si es de los míos, un conocido menos.
Desesperación: La mecha de toda revolución.
Desesperado, -da: Un hombre en un túnel sin salida.
Desesperante: La parsimonia de nuestros gobernantes.
Desesperanza: Un crimen de la humanidad.
Desesperanzar: El progreso sin filosofía.
Desesperar: Un tempus interruptus.
Desestimar: 1. Un acto de salubridad psicoemocional. 2. La compañía yerma.
Desfachatado, -da: La irrespetuosidad personificada.
Desfachatez: El insulto conductual.
Desfalcar: Un hurto con traje y corbata.
Desfalco: La estafa sociabilizada al pobre.
Desfallecer: Frente a una playa de aguas turquesas, asegurado.
Desfallecimiento: La discontinuidad en la costumbre del buen comer.
Desfavorable: En una sociedad que brinda culto a la juventud, el hacerse mayor.
Desfavorecer: La falta de oportunidades.
Desfigurar: El futuro sin futuro.
Desfiladero: Un pasillo claustrofóbico.
Desfilar: Participar de la colmena.
Desfile: La homogeneización de la individualidad.
Desflorar: Se mire como se mire, no deja de ser un robo.
Desfogar: Parte del ciclo continuo del hombre animal.
Desgaire: El vuelo de la atención.
Desgajadura: El mordisco furioso del viento.
Desgajar: Diseccionar un todo.
Desgaje: El minimalismo de un conjunto.
Desgalichado, -da: Persona desprendida de su eje de gravedad.
Desgana: El triunfo del tedio.
Desganado, -da: Individuo sobreestimulado en el tiempo.
Desganar: Cualquier exceso.
Desgañitarse: La histeria con voz propia.
Desgarbado, -da: Se nace, no se hace.
Desgarrador, -ra: La maldad humana.
Desgarrar: Ceder a terceros nuestra mismidad.
Desgarro: La herida de un corazón roto.
Desgarrón: La pérdida de un ser amado.
Desgastar: La paciencia de la muerte.
Desglosar: La voluntad del estudio.
Desgobernar: El gobierno de los tontos.
Desgobierno: La atomización del parlamentarismo.
Desgoznar: Asaltar la intimidad.
Desgracia: Un reverso del destino.
Desgraciado, -da: Una persona con moralina.
Desgraciar: La imposición de la culturilla a la Cultura.
Desgranar: El tamiz educativo.
Desgreñar: Un efecto secundario del amor.
Desguarnecer: Recuperar la sobriedad.
Deshabitado, -da: La mente de demasiadas personas.
Deshabituar: El punto y seguido para un nuevo hábito
Deshacedor, -ra: Un entusiasta de los entuertos.
Deshacer: Ser.
Desharrapado, -da: El hábito no hace a la persona.
Deshechizar: Desconectar la televisión.
Deshecho, -cha: El hombre que no deja de mirar atrás.
Deshelar: Abrazar a alguien.
Desheredado, -da: Los sin voz.
Desheredar: Retirar la esperanza.
Desherrar: Comprar la libertad.
Deshidratar: Beberse la sustancia del prójimo.
Deshielo: La cuenta atrás.
Deshilachar: La pobreza elevada a moda.
Deshilar: Corregir un error.
Deshilvanado, -da: Las razones partidistas.
Deshilvanar: Transmutar un borrador.
Deshinchadura: El paso atrás del orgullo.
Deshinchar: El ego, con el paso de los años.
Deshojar: 1. Una destreza animal. 2. Yo, de pinche de mi mujer.
Deshollinador, -ra: Sin lugar a dudas Bert, el personaje de Mary Poppins.
Deshonillar: Un hábito recurrente para los que fumamos en pipa.
Deshonestidad: Una mezcla de falta de valentía y de mezquindad a partes iguales.
Deshonesto, -ta: Los supuestos amigos que quedaron por el camino.
Deshonor: La traición a uno mismo.
Deshonra: La vergüenza tendida al sol.
Deshonrar: Los políticos a la Política como instrumento de gestión del bien común.
Deshonroso, -sa: La falta de dignidad humana.
Deshora: Un acontecimiento fuera del reloj.
Deshuesar: Un castigo al olvido eterno.
Desiderátum: Vivir escribiendo junto al mar.
Desidia: La energía estancada o la energía descargada.
Desidioso, -sa: Tanto se nace como se hace.
Desierto: Un espacio de intimidad propio de la Naturaleza.
Designación: Una mochila más a cargar.
Designar: Un acto de poder.
Designio: Recordar cada día quién es mi Yo verdadero.
Desigual: Principio asimétrico de la vida.
Desigualar: El tránsito natural entre vasos comunicantes.
Desigualdad: La base del capitalismo.
Desilusión: Mirar desde adulto los sueños propios de joven.
Desilusionar: Uno solo se sobra.
Desinencia: La personalidad de la palabra.
Desinfección: Un acto de confinamiento local sanitario.
Desinfectante: La Parca de los microorganismos.
Desinfectar: Reparar.
Desinflamar: Llamar al orden.
Desinflar: Recriminar la especulación.
Desintegración: La tendencia segregacionista de los pueblos.
Desintegrar: La carencia de solidaridad.
Desinterés: Todo aquello que se haya en el extra radio del ombligo propio.
Desinteresado, -da: Un encefalograma plano.
Desinteresar: La verdadera razón tras la cultura del ocio.
Desistimiento: Estado de resignación.
Desistir: Ausencia de fuerza motriz.
Desleal: Un traidor al tiempo.
Deslealtad: El ejercicio de los gobernantes sobre su propio programa electoral.
Desleimiento: Nuestra corporeidad vuelta al polvo originario.
Deslenguado, -da: Propio de cráneos huecos.
Desliar: Rehacer la cama.
Desligar: Pasar página.
Deslindar: Colocar dos camas allí donde solo había una.
Deslinde: Definir tu propia personalidad.
Desliz: Entre parejas es una traición al respeto propio y ajeno.
Deslizadizo, -za: Un niño en un tobogán.
Deslizamiento: Efecto gravitatorio de mi barriga.
Deslizar: El arte criptográfico de la oratoria política.
Deslomar: Cualquier trabajo a partir de cierta edad.
Deslucido, -da: Todo talento en medio de un tumulto de mediocridad.
Deslucimiento: La incomprensible marca textil de las prendas de moda.
Deslucir: Una tertulia monopolizada por un monologuista egocéntrico.
Deslumbrador, -ra: La sonrisa de mi mujer y de mis hijas.
Deslumbrante: La expansión de la mente.
Deslumbrar: Si es con intencionalidad oculta, no me interesa.
Deslustrar: La prueba inequívoca de lo vivido.
Deslustre: Mi profesión.
Desmadejar: La falta de sentido en la vida.
Desmán: La judicialización de la vida por parte de los analfabetos.
Desmandarse: La socialización adulterada de la libertad personal.
Desmangar: Reinventar una herramienta.
Desmantelado, -da: El orden humanista de la sociedad.
Desmantelar: El mal denominado progresismo sobre la educación cívica.
Desmaña: Cuando habilidad y hábitat no son correspondidos.
Desmañado, -da: Un pez trepando por un árbol.
Desmarcar: (-se) Yo de la normalidad social.
Desmayar: La ausencia de cultura general.
Desmayo: Voluntad inconsciente de no querer ser consciente.
Desmedido, -da: La escasez de pudor.
Desmedirse: Ciertos autoproclamados demócratas sobre la propia Democracia.
Desmedrado, -da: La hucha pública de las pensiones.
Desmedrar: El Mercado sobre el Bienestar Social.
Desmejorar: El tedio como hábito.
Desmelenar: (-se) Romper la rigidez dela adulto.
Desmembrar: La estrategia de la victoria.
Desmemoriado,-da: Una característica casi patológica de un servidor.
Desmemoriarse: Recurso de salud mental.
Desmentido,-da: Tanto la bondad como la maldad universal humana.
Desmentir: 1. Reafirmar una mentira. 2. Un paso al frente de la verdad.
Desmenuzamiento: El espíritu del reciclaje.
Desmenuzar: Una persona inquieta jugando a trocear la piel de la naranja.
Desmerecer: Una riqueza heredada.
Desmerecimiento: El apático y el mediocre.
Desmesura: La sexolización de las relaciones humanas.
Desmesurado, -da: El consumismo impulsivo.
Desmigajar: El alimento de la senectud.
Desmirriado, -da: La mala vida por voluntad propia o por injusticia social.
Desmochar: Imponer la escala humana a la naturaleza.
Desmontaje: La volatilidad de la creación humana.
Desmontar: Yo, de la velocidad de vértigo de la sociedad.
Desmoralizar: El esfuerzo sin recompensa.
Desmoronamiento: El proyecto de la Unión Europea.
Desmoronar: El ciclo de la vida.
Desmovilizar: El triunfo social del consumismo.
Desnatar: Siempre, por favor.
Desnaturalizado,-da: El transhumanismo.
Desnaturalizar: El avance de la tecnología.
Desnivel: Una relación de poder.
Desnivelar: Una necesidad temporal.
Desnucar: Un viaje express fuera de la vida.
Desnudar: 1. Desproteger. 2. Liberar.
Desnudez: Un rasgo natural de la condición humana.
Desnudo, -da: 1. El poeta en sus poemas. 2. El ejercicio de un derecho personal.
Desnutrición: 1. (del espíritu) La falta de cultura. 2. (del cuerpo) Una circunstancia tan incomprensible como injusta en un mundo abundante.
Desobedecer: A veces, una cuestión de ética personal.
Desobediencia: Un derecho civil cada vez más extendido que comienza a adulterar los propios principios rectores de la Democracia.
Desobediente: Si es sin razón objetiva, un presunto delincuente.
Desobstruir: Siempre un imperativo en materia de bien común.
Desocupación: El éxodo rural.
Desocupado, -da: Una epidemia de las sociedades occidentales.
Desocupar: Un cambio de turno.
Desoír: Un mal extendido en una era hiperactiva.
Desojar: Un escritor que peina canas.
Desolación: Una vida no-vida.
Desolado, -da: Un desgarramiento interior.
Desolador, -ra: Un bosque quemado.
Desolar: La avaricia humana.
Desoldar: Redefinir el sistema de referencia.
Desolladura: Trabajar para subsistir.
Desollar: La otra cara de la estética alimentaria.
Desorbitado, -da: Ciertas fortunas.
Desorbitar: La fama mediante la telebasura.
Desorden: 1. La dualidad del orden. 2. Preludio del caos.
Desordenado, -da: Persona exenta de armonía interior.
Desordenar: Patología del equilibrio.
Desorganización: El principio del fin.
Desorganizar: El Mercado respecto al sistema educativo.
Desorientación: El progreso sin Filosofía.
Desorientado, -da: 1. Una hormiga sin antenas. 2. Un hombre sin propósito social.
Desorientar: El horizonte cambiante.
Desosar: Llegar al fondo de la cuestión.
Desovar: Uno de tantos milagros de la vida.
Desove: La perseverante tenacidad de la continuidad.
Desovillar: La vocación del filósofo.
Desoxidar: Una opción vital que acaba convirtiéndose en imperativo.
Despabilado,-da: Una persona consciente.
Despabilar: A todos los efectos, un buen café.
Despacio: Mi padre conduciendo.
Despachado, -da: Una de las diversas inteligencias múltiples en su justa posición y lugar.
Despachar: Un hábito conductual olvidado por nuestros gobernantes.
Despacho: Mi refugio personal.
Despachurrar: Un insecticidio muchas veces no intencionado.
Despampanante: Cualquier persona vestida de gala.
Despampanar: La capacidad resolutiva de mi mujer.
Despanzurrar: El acto de un ladrón poco mañoso.
Desparejado,-da: 1. El calcetín. 2. Una cama medio vacía.
Desparejar: Un acto doloso.
Desparejo: Ciertos dichos con sus hechos.
Desparpajo: Una cuestión de práctica.
Desparramiento: Una limpieza anunciada.
Desparramar: Una técnica de visión global.
Despasar: Priorizar la luz solar a la penumbra de las cortinas.
Despatarrarse: Un acto merecedor de admiración.
Despavorir: Sin duda, las arañas.
Despectivo, -va: Una conducta que ciertas personas y circunstancias se merecen.
Despecho: La semilla del mal.
Despechugado,-da: El valor efímero de una generación de nuevas cantantes.
Despedazar: Actitud propia de los soberbios.
Despedida: Aligerar la mochila personal.
Despedir: Un acto que se aprende con los años.
Despegado, -da: La aceptación en acción.
Despegar: Muchos son los llamados y pocos los elegidos.
Despegue: El más importante es el despegue interior.
Despeinar: La broma mañanera de la almohada.
Despejado, -da: Una mente serena.
Despejar: Un quehacer diario.
Despeluznante: La imaginación de los cineastas de terror.
Despellejar: Un juicio mediático.
Despender: El arte de los políticos en ascender socialmente.
Despensa: Un tesoro.
Despensero,-ra: Una persona con muchos pretendientes.
Despeñadero: El espacio inexplorado de una startup.
Despeñar: Cambiar las reglas del Mercado sin aviso previo.
Despepitar: Personalmente prefiero la uva con sus pepitas.
Desperdiciar: El talento sin ocupación.
Desperdicio: La comida de los restaurantes que no se consume.
Desperdigar: Quien mucho abarca poco aprieta.
Desperezarse: Un ejercicio cotidiano.
Desperezo: El tránsito entre el homo sentado y el homo en pie.
Desperfecto: Daño ocasionado por la dictadura del Mercado al sistema democrático.
Despertador: Un objeto tan antipático como irritante.
Despertar: Lo intento todos los días, aun sin demasiado éxito.
Despiadado,-da: Los balances de explotación.
Despicarse: Desdramatizar una situación.
Despido: El final de un capítulo.
Despierto, -ta: En muchas ocasiones, una ilusión.
Despilfarrar: Aparentar.
Despilfarro: 1. Un lujo de ricos. 2. Las tasas de paro.
Despintar: Sueños sin ilusión.
Despiojar: La verdadera historia de Goliat contra David.
Despistar: Estrategia del consumismo.
Despiste: Hacer sin pensar.
Despistado: Servidor.
Desplacer: La monotonía.
Desplantar: Con inteligencia y sensibilidad, el paso previo a un replante en un nuevo emplazamiento.
Desplazamiento: Salirse por fuerza mayor de la fila.
Desplazar: La dictadura de la sociedad joven versus los mayores en edad.
Desplegar: Ampliar el radio de acción personal.
Despliegue: Un acto de colonización.
Desplomar: Falta de vigor.
Desplome: La civilización europea.
Desplumar: Una acción avariciosa.
Despoblación: 1. Un éxodo por necesidad. 2. La devaluación de la vida rural.
Despoblado: Un territorio sumido en el olvido.
Despoblar: Los desequilibrios de una economía globalizada.
Despojar: Sustraer las rentas por trabajo.
Despojo: Un robo en toda regla.
Desposado, -da: El instinto de supervivencia emocional y física de la especie.
Desposar: Compartir la mismidad.
Desposeer: Impedir el desarrollo de las habilidades innatas.
Desposeimiento: La penalización sociabilizada.
Desposorios: La promesa de un futuro mejor.
Déspota: La democracia de las mayorías.
Despótico, -ca: La razón sinrazón.
Despotismo: Las leyes del Mercado.
Despotricar: 1. Un mal hábito generalizado. 2. La bilis de la amargura.
Despreciable: El mal gratuito.
Despreciar: El recelo a lo diferente.
Desprecio: Enfermedad del espíritu.
Desprender: La búsqueda de la ligereza.
Desprendido,-da: Persona con un alto nivel de salubridad emocional.
Desprendimiento: Una falsa seguridad.
Despreocupación: La ausencia de la ocupación.
Despreocupado, -da: Los niños.
Despreocuparse: 1. Dejación de la responsabilidad. 2. La sombra alargada de la agonía.
Desprestigiar: Un acto propio de cobardes y mezquinos.
Desprestigio: Una desfiguración de la personalidad.
Desprevenido,-da: El hombre bueno.
Desproporción: La reivindicación de las razones del analfabeto.
Desproporcionado, -da: La manifestación de una mala gestión emocional.
Desproporcionar: Un interés para beneficio propio.
Despropósito: El Estado del Bienestar Social sin derechos sociales garantizados.
Desproveer: Robar el futuro.
Desprovisto, -ta: El hombre desnudo.
Después: Tanto una excusa como un consuelo.
Despuntar: Situarse en el punto de mira de los envidiosos.
Desquiciamiento: La normalización de lo anormal.
Desquiciar: Dinamitar los muros del confort.
Desquitar: Reequilibrar.
Desquite: Cerrar la boca ajena.
Desrabotar: Desnaturalizar la naturaleza.
Desrizar: La culturalización de la infancia.
Destacamento: La punta de la lanza.
Destacar: Una exposición peligrosa.
Destajo: Una versión de la esclavitud.
Destapar: Siempre toda una expectación.
Destartalado: El roce del uso.
Destazar: 1. La mano diestra del carnicero. 2. La desalmanización del animal.
Destellar: El amor apasionado.
Destello: Una idea.
Destemplanza: Vivir fuera del momento presente.
Destemplar: Atacar la chispa vital.
Destemple: La batalla de lo invisible.
Desteñir: Restar posibilidades.
Desternillarse: Una medicina para el alma.
Desterrar: El exilio forzoso de los que quieren permanecer.
Destetar: El minuto uno del sufrimiento humano.
Destete: La sociabilización de un ser animal.
Destiempo: Los mayores de 45 años frente al mercado laboral.
Destierro: A veces, es la única salida digna.
Destilación: Lo que hace la vida con los hombres.
Destilador, -ra: La máquina de hacer dinero.
Destilar: El acto propio de respirar.
Destilería: La sociedad de mercado.
Destinación: Una ruleta.
Destinar: El dedo del poder
Destinatario: En la vida, la muerte.
Destino: 1. Una diosa caprichosa y muchas veces impertinente. 2. Una incógnita siempre impermanente.
Destitución: El final de un capítulo.
Destituir: Reciclar una posición.
Destornillador: El valor de la utilidad.
Destornillar: Un proceso quirúrgico.
Destrabar: Una necesidad diaria para cualquier existencia.
Destral: Un arma de doble intencionalidad.
Destrenzar: Hacerse mujer.
Destreza: Una habilidad tan singular como su protagonista.
Destripar: 1. Un tipo de hambre enloquecido. 2. La huella animal.
Destripaterrones: El reflejo de la insociabilización.
Destronar: Un rol de poderosos.
Destrozador, -ra: El progreso a velocidad supersónica.
Destrozar: Una falta de sensibilidad y de respeto.
Destrozo: Lo que las redes sociales a la imaginación.
Destrucción: La acción del hombre sobre el planeta.
Destructivo, -va: La inconsciencia y la sinrazón.
Destructor,-ra: La creencia de control del hombre.
Destruir: Borrar el tiempo.
Desudar: Ser aséptico.
Desuello: Unidad de medida mental.
Desunión: El triunfo del recelo.
Desunir: La táctica de los listos.
Desusado, -da: La Filosofía, sin ir más lejos.
Desuso: Tristemente, los valores humanistas.
Desvaído, -da: El parado.
Desvainar: Un quehacer de los supermercados.
Desvalido, -da: Persona a quien le han arrebatado su dignidad.
Desvalijar: Un acto ruin propio de los nuevos ricos.
Desvalorizar: El pensar.
Desván: Un baúl de los recuerdos.
Desvanecer: El haber del tiempo.
Desvanecimiento: El fin de una singularidad.
Desvariar: Todos los políticos.
Desvarío: Un mal extendido.
Desvelado, -da: Persona que alarga una agonía.
Desvelar: Los problemas sin resolver.
Desvelo: La consciencia activa.
Desvencijado, -da: La fuerza de consistencia de los años.
Desventaja: La desigualdad de oportunidades.
Desventajoso, -sa: Formarse en una materia que no tiene salida laboral.
Desventura: Situarse fuera del momento justo.
Desventurado,-da: El que busca trabajo sin hallarlo.
Desvergonzado, -da: Un patán.
Desvergonzarse: La práctica de la experiencia.
Desvergüenza: Acusar a alguien de ser pobre.
Desvestir: Quitar el hábito al profesional.
Desviación: Un efecto de reinventarse.
Desviar: (-se) En los jóvenes, un impulso irrefrenable de curiosidad. En los mayores, una causa de fuerza mayor.
Desvío: Un cambio de sentido vital.
Desvirgar: Un acto siempre falto de glamour.
Desvirtuar: La Moral.
Desvivirse: Vivir por y para otros.
Detallar: Levantar acta notarial de una realidad.
Detalle: Un beso sin palabras.
Detallista: Mi mujer.
Detective: un chafardero con licencia.
Detector: Un chivato.
Detención: Asfixiar el espacio.
Detener: La caza del hombre.
Detenidamente: Parar el tiempo.
Detenido, -da: Un culpable tácito.
Detenimiento: Visión unidireccional.
Detentador, -ra: Las multinacionales.
Detentar: Los poderes de facto.
Detergente: El inquisidor de las historias vividas.
Deteriorar: Acto de violencia contra la esencia de algo o alguien.
Deterioro: La manifestación de la dejadez.
Determinación: El rasgo de los valientes.
Determinado,-da: Las circunstancias singulares de cada persona.
Determinante: El contexto socio-cultural.
Determinar: Los padres sobre los hijos y la sociedad sobre los padres.
Determinativo, -va: La inteligencia natural.
Determinismo: El sistema de referencia existencial.
Detestable: La violación.
Detestar: La ignominia sociabilizada.
Detonación: La resistencia superada.
Detonador: El dedo del cobarde o del prudente.
Detonante: Los desequilibrios sociales.
Detonar: Acelerar un proceso de transformación.
Detracción: La acción de la larga crisis económica actual.
Detractar: Propio de hombres mediocres.
Detractor, -ra: Habitualmente, los fundamentalistas.
Detrás: Las vergüenzas propias.
Detrimento: La expulsión forzosa del sistema.
Detrito: La descomposición total de la forma.
Deuda: Una espina clavada que escuece.
Deudor, -ra: Todas las personas, al menos, que viven de rentas del trabajo.
Devanar: Recuerdo de niñez de mi abuela.
Devanear: La práctica normalizada de las relaciones entre los jóvenes de hoy en día.
Devaneo: Yo con mis reflexiones efímeras.
Devastación: El peligro del fin de la humanidad.
Desvastador, -ra: La imprudencia humana.
Devastar: La explotación sin límites de los recursos naturales.
Devoción: Un acto de amor incondicional.
Devocionario: El peligro literal de la trascendencia.
Devolución: Regresar al punto de origen.
Devolver: El derecho a la rectificación.
Devorador, -ra: El hambre de la sobrepoblación mundial.
Devorar: No prever el mañana.
Devoto, -ta: Los consumidores al Mercado.
Deyección: El constipado de la Tierra.
Día: La sincronicidad de un pasado, un presente y un futuro inmediato.
Diabetes: El castigo al placer.
Diabético, -ca: El guerreo de las agujas.
Diablesa: Una mujer poseída por la ambición.
Diablillo: La picardía manifestada.
Diablo: La dualidad del ángel.
Diablura: La niñez explorando los límites del mundo de los adultos.
Diabólico, -ca: El mal gratuito personificado.
Diaconisa: Una huella arqueológica de la supremacía del machismo.
Diácono: Un sacerdote a medio camino entre los placeres mundanos y divinos.
Diadema: El distintivo de la abeja reina.
Diáfano,-na: Un espacio sitiado que respira libertad.
Diafragma: Un acordeón respirado.
Diagnosticar: Iluminar la oscuridad.
Diagnóstico, -ca: La conceptualización de una incógnita.
Diagonal: La línea divisoria entre la Barcelona rica y la Barcelona pobre.
Diagrama: El rostro simbólico de la lógica.
Dialéctico, -ca: El profesional liberal en el Mercado.
Dialecto: El confinamiento de la lengua.
Diálisis: El divorcio por terceros de las sustancias.
Diálogo: Mayoritariamente de besugos.
Diamante: 1. La fuerza irresistible de la brillantez sobre los humanos. 2. El valor de la tenacidad.
Diamantino, -na: La sonrisa facial sincera.
Diametral: El hilo invisible entre la vida y la muerte.
Diámetro: Un camino sin curvas.
Diana: El bolsillo de los consumidores.
Diantre: El clamor del interrogante.
Diapasón: El tímpano musical de los sordos.
Diapositiva: Cualquier valor universal en la gran cueva de Platón.
Diariamente: Un hábito fruto de una práctica reiterada.
Diario, -ia: El tiempo extra de la muerte.
Diarrea: El cabreo del estómago.
Diástole: 1. El corazón expirando. 2. La relajación de la vida.
Diatriba: La quiebra de la paciencia.
Dibujante: Un artesano vocacional de los volúmenes en dos dimensiones.
Dibujar: Observar e imaginar.
Dibujo: Un acto de magia.
Dicción: La mecánica del habla.
Diccionario: Un manual de consensos.
Diciembre: Mi mes natal.
Dicotiledóneo,-ea: Una planta de raza.
Dicotomía: La raíz de la inestabilidad humana.
Dictado: Una imposición.
Dictador: A veces, una necesidad social.
Dictadura: La imposición de la fuerza sobre la razón.
Dictamen: Un juicio de valor más.
Dictaminar: La apología de los medios de comunicación y la publicidad comercial.
Dictar: Someter.
Dictatorial: El capitalismo o el comunismo sin prejuicios.
Dicterio: Un menosprecio culto.
Dicha: Un estado escurridizo.
Dicharachero, -ra: El efecto del relax vital.
Dicharacho: La marca personal de los chistosos.
Dicho: Una creencia elevada a cátedra.
Dichoso, -sa: Persona agradecida circunstancialmente.
Didáctico,-ca: La imaginación.
Diecinueve: El salón de la inexperiencia que se siente experta.
Diecinueveano,-va: El fin de una década.
Dieciocho: Una meta convertida en posición de salida.
Dieciséis: La madurez prematura.
Diecisiete: La parrilla de salida.
Diedro: Familia geométrica de mi cartera.
Diente: 1. El valor de la utilidad. 2. La fragilidad de lo duro. 3. El tesoro de los mayores. 4. La estética del alma.
Diéresis: La corona del rey de la fiesta.
Diestra: El lado predilecto de Dios.
Diestramente: Nacido para ello.
Diestro, -tra: Un acto reflejo cerebral o una culturalización del cerebro.
Dieta: Una pesadilla.
Dietario: Un notario de la cotidianidad.
Diez: Una aureola social.
Diezmar: Sea natural o artificial, una criba.
Diezmo: Un porcentaje largamente sobrepasado por las políticas impositivas actuales.
Difamación: El parapeto social de los ruines.
Difamador, -ra: Un mentiroso doloso.
Difamante: Los juicios de valor sin verificación.
Difamar: La huida hacia delante del mezquino.
Diferencia: La riqueza de la diversidad.
Diferencial: La personalidad.
Diferenciar: Poner las cosas en su justa medida y valor.
Diferente: Una pieza fuera de su lugar.
Diferir: El profundizar sobre las cosas.
Difícil: Superarse a si mismo.
Dificultad: Aprender inglés.
Dificultar: Toda aquella vía alternativa a los cánones establecidos.
Dificultoso, -sa: Ganarse la vida en un mundo sobrepoblado y profundamente competitivo.
Difteria: Un estrangulador.
Difundir: Un acto de rebeldía.
Difunto, -ta: Persona que ya no tiene problemas.
Difusión: En manos del poder, un virus.
Difuso,-sa: El mañana.
Digerible: La monotonía.
Digerir: Resistencia estomacal.
Digestión: Un acto mecánico de transitar por la vida.
Digestivo,-va: Los pequeños placeres del alma.
Digital: Un corsé existencial invisible.
Dígito: El átomo de la realidad tecnológica.
Dignarse: Una obligación social.
Dignatario: Un buzón andante de adulaciones.
Dignidad: Un derecho natural inalienable.
Dignificar: La autorealización.
Digno, -na: Toda persona en su justo contexto.
Digresión: Gravedad egocentrista.
Dije: Todo pensamiento sujeto a replanteamiento.
Dilación: La consumación de los sueños.
Dilapidar: Enfermedad consumista.
Dilatación: El espacio constituido por la vida.
Dilatado, -da: La clase trabajadora pobre.
Dilatar: Dinámica de supervivencia de los políticos.
Dilatorio, -ia: La justicia social.
Dilecto,-ta: El amor focalizado.
Dilema: La pregunta del sabio.
Diletante: El humanista clásico.
Diligencia: Brilla por su ausencia.
Diligente: Rara avis.
Dilucidar: La obsesión del filósofo.
Dilución: El individuo en la sociedad.
Diluir: El propósito del sistema.
Diluviar: Una mala gestión emocional de la Naturaleza.
Diluvio: Examen de la consistencia de la obra humana.
Dimanar: Los hijos de los padres, los padres de la sociedad, y la sociedad de la cultura.
Dimensión: Una realidad posible.
Dimes y diretes: Un juego de chafarderos.
Diminutivo, -va: La cariñosa caricia del lenguaje.
Diminuto, -ta: Una percepción relativa.
Dimisión: Una salida por la puerta de atrás.
Dimisionario,-ia: Persona que se ve superada por causas de fuerza mayor.
Dimitir: Un fin de capítulo.
Dinamarca: Un país de otra cultura.
Dinamarqués, -sa: Un vikingo europeizado.
Dinámico, -ca: La energía vital empujando.
Dinamismo: La evolución robótica.
Dinamita: La tasa de desempleo.
Dínamo: El cuerpo humano.
Dinamómetro: El PIB nacional.
Dinasta: Un apadrinado.
Dinastía: El privilegio de la cuna.
Dineral: El coste de la vida.
Dinero: Una medida de control de los ricos.
Dintel: Parte de la jerarquización arquitectónica.
Diocesano,-na: Un plebeyo del obispado.
Diócesis: La iglesización del viejo imperio romano.
Dioptría: Un dolor de cabeza.
Diorama: La realidad humana dentro de la realidad humana.
Dios: 1. Un ente ausente. 2. El mayor imaginario nunca creado por el hombre. 3. Un instrumento artificial de control de masas.
Diosa: Nuestras madres y mujeres.
Diploma: Un papel mojado en la gran noria de la vida.
Diplomacia: La hipocresía con modales.
Diplomático, -ca: Un falso refinado.
Dipsomaniáco, -ca: 1. Un alcohólico de toda la vida. 2. Persona débil y/o enferma.
Díptero: La armonía de la paridad.
Diptera: Una familia de cojoneros.
Díptico: Un espacio tríplemente rentabilizado.
Diptongo: Una vocal transilábica.
Diputación: La sombra próxima del poder.
Diputado,-da: Un vividor a cuenta ajena.
Dique: 1. La fortaleza de la densidad. 2. Los límites del reino de Neptuno.
Dirección: 1. Una opción. 2. Un ubicador. 3. Una cabeza.
Directivo, -va: 1. Un lobo para el hombre. 2. Una oveja para el Mercado.
Directo, -ta: El camino más corto y liberador.
Director, -ra: Un hilandero.
Directriz: Antiguamente, los valores morales. Hoy, el marketing.
Dirigente: Un puesto que se otorga a cualquiera.
Dirigible: Una bombona de gas con alas y volante.
Dirigir: Compartir una visión.
Dirimente: El filósofo en su intimidad.
Dirimir: Una acción mal vista en una sociedad superficial.
Discernimiento: Buscar la verdad substancial de las cosas.
Discernir: Hábito de las personas de Razón.
Disciplina: Conducta adquirida mediante la práctica.
Disciplinar: 1. Valorar la cultura del esfuerzo. 2. Si no es desde la razón, no me interesa.
Disciplinario, -ia: Una acción correctora a tiempo.
Discípulo,-la: El hombre frente a la maestría de la vida.
Disco: 1. La esencia geométrica del cosmos . 2. La realización de la filosofía pitagórica.
Discóbolo: La belleza del movimiento de las formas.
Díscolo,-la: El pensador.
Disconformidad: Un estado de salubridad psicoemocional en una sociedad enferma.
Discontinuidad: La constante existencial jugando a historias posibles.
Discontinuo, -ua: La narrativa vital personal.
Discordancia: El nodo entre opuestos.
Discordante: El libre Mercado frente a la Democracia, y viceversa.
Discordar: Media humanidad versus la otra media, y ésta con su propia media, y así en una sucesión periódica infinita.
Discorde: Muchas veces, yo conmigo mismo.
Discordia: Un tira y afloja de intereses partidistas.
Discreción: La explotación tercermundista del primer mundo consumista.
Discrecional: La capacidad individual de soñar.
Discrepancia: Cualquier contraste de opiniones intergeneracional, intersocial e intercultural.
Discrepar: Un ejercicio saludable que, a medida que se sube en clases sociales, se está perdiendo por prohibición táctica.
Discreto, -ta: El pobre en una sociedad de opulencia.
Discriminación: El algoritmo negativo de los círculos sociales establecidos.
Discriminar: Proteger el valor de un activo.
Disculpa: Una conducta olvidada.
Disculpar: (-se) Romper el ombligocentrismo.
Discurrir: La posición móvil de la vida.
Discursear: Un tipo de oratoria sin sustancia.
Discurso: Un autojaleamiento en voz alta.
Discusión: 1. Choque de razones donde raras veces la razón tiene Razón. 2. El pulso perdido de la razón consensuada. 3. Batalla que solo se gana buscando la paz, no la razón.
Discutible: Todo.
Discutir: Un duelo emocional.
Disecar: Extinguir en vida formaciones y actividades laborales.
Diseminar: La razón del Big-Bang.
Disensión: El carácter de la adolescencia.
Disentería: La sombra roja de la muerte.
Disentimiento: El lujo menospreciado de las sociedades abiertas.
Disentir: El pensamiento crítico hecho verbo y posicionamiento.
Diseñar: Abstraer un contexto.
Diseño: La cocina de la posverdad.
Disertación: Nuestra vida.
Disertar: 1. Un gallo en su gallinero. 2. Una práctica tediosa para la generación de los mensajes breves e instantáneos.
Diserto, -ta: 1. Un pedagogo vocacional. 2. Por lo general, un amante de la atención ajena.
Disfavor: La conducta habitual de la clase social alta sobre la clase social inferior.
Disforme: El mal intencionado.
Disformidad: La obesidad.
Disfraz: Un alter ego.
Disfrazar: (-se) 1. Tiempo personal de desinhibición social. 2. Uno de los mayores placeres de mi mujer.
Disfrutar: 1. Un deber existencial al que pocos se obligan. 2. Una actitud vital que debe ser trabajada cada día.
Disfrute: El estado consciente del alma sintiéndose viva.
Disfumino: Mis fantasmas, todo lo que puedo.
Disgregar: 1. Efecto de la enajenación endogámica. 2. Empequeñecer.
Disgustar: Los desplantes no verbales.
Disgusto: Un efecto colateral de vivir en sociedad.
Disidencia: La Razón sobre cualquier tipo de fundamentalismo.
Disidente: Yo frente a la tontería.
Disimulado, -da: Los de ámbito social no los aguanto.
Disimulador, -ra: El maquillaje y la ropa.
Disimular: Fingir.
Disimulo: Pose formal de los mezquinos y los mediocres.
Disipación: El sueño.
Disipado, -da: El anciano frente al mundo.
Disipar: Los malos recuerdos.
Dislate: El motor social.
Dislocación: Trabajadores sin trabajo.
Dislocar: Sacar a un hombre social de su rol social.
Disloque: Trabajar para no llegar a fin de mes.
Disminución: La solidaridad.
Disminuir: Un agravio comparativo.
Disnea: Cansancio vital.
Disociación: Separar los sueños de juventud del sentido de la vida del adulto.
Disociar: El corte de bisturí del Mercado sobre las personas.
Disolución: Dejarse diluir en el todo establecido.
Disoluto, -ta: Un adicto del consumismo.
Disolvente: Los portales y departamentos de selección de personal.
Disolver: Un acto de extinción.
Disonancia: Una grieta entre complementarios.
Disonante: Aunque bueno, una sopa con macarrones.
Disonar: Un docente universitario buscando trabajo de camarero.
Dispar: Un calcetín confundido.
Disparador: El miedo.
Disparar: Intentar barrer un obstáculo.
Disparatado, -da: La subida de precios de consumibles cuando más se necesitan.
Disparatar: Con mayor frecuencia que los locos, los egoístas.
Disparate: El mundo al revés.
Disparidad: Los dos polos magnéticos de un mismo imán.
Disparo: La sonora velocidad de la muerte.
Dispendio: El tiempo derrochado por formarse de una persona que no encuentra trabajo.
Dispendioso, -sa: Un sector público mayor que el sector privado.
Dispensa: Del pobre frente a los impuestos.
Dispensar: Un atributo potencial del que tiene.
Dispensario: Allí donde la ciencia hace magia ancestral.
Dispersar: Redistribuir la densidad.
Dispersión: Todo árbol genealógico.
Disperso, -sa: La mente dormida.
Displicencia: La acción sin motivación.
Displicente: El perfil medio de los funcionarios.
Disponer: Jugar con el espacio.
Disponibilidad: Un lujo en un mundo que rota vertiginosamente.
Disponible: Los padres, siempre.
Disposición: La dualidad de la oportunidad del lugar.
Dispositivo, -va: Aunque nos resistamos, somos todos en el gran engranaje de la vida.
Dispuesto, -ta: El amigo.
Disputa: El mercadeo de la razón.
Disputar: La artimaña de los políticos que no saben gobernar.
Disquisición: El desvío de la atención quirúrjica de un mago.
Distancia: Si es salvable no es más que voluntad y tiempo.
Distanciar: El silencio.
Distante: 1. Una actitud deliberada. 2. La Fortuna.
Distar: El querer del poder.
Distender: Desdramatizar.
Distensión: Un masaje emocional.
Distinción: La azarosidad del momento preciso.
Distinguido, -da: Un tratamiento que se puede comprar.
Distinguir: Señalar un blanco potencial.
Distintivo, -va: La marca de vida.
Distinto, -ta: Un accidente en la sustancia del todo.
Distracción: Las hormonas.
Distraer: La cara pública de los políticos.
Distraído, -da: El pueblo.
Distribución: (social) 1. Una utopía. 2. El virus a exterminar por los ricos.
Distribuir: Un principio teórico de justicia social.
Distributivo, -va: La política fiscal.
Distrito: Un pueblo urbanitas.
Disturbio: 1. Una interferencia en la legalidad. 2. La onda expansiva de la reivindicación.
Disuadir: Actitud a la que hace tiempo renuncié.
Disuasivo,-va: Una mirada llena de ternura.
Disuelto, -ta: La capacidad de decidir.
Disyunción: La dualidad opuesta de una misma naturaleza.
Disyuntivo, -va: La vida manifestada en una continua decisión.
Diurético, -ca: La cerveza.
Diurno, -na: La culpable de la calidad de los sueños de la noche.
Diva: Mi suegra.
Divagación: Vivir sin un sentido de vida propio.
Divagar: Navegar sin rumbo.
Diván: Un confesionario laico.
Divergencia: La realidad de los sueños.
Divergente: Cualquier humanista en la sociedad contemporánea.
Divergir: El Mercado de la Democracia.
Diversidad: Una riqueza mal gestionada.
Diversión: La bandera apropiada por el consumismo.
Diverso, -sa: Un mundo de posibilidades.
Divertido, -da: Un estado de ánimo sorprendido.
Divertimiento: Algo muy personal, aunque transferible.
Divertir: La función de los tertulianos televisivos.
Dividendo: Una cuestión de fe que muy pocos pueden constatar.
Dividir: La reformulación de un divisible.
Divinidad: Una creación del hombre como medio de enajenación de su cotidianidad.
Divinizar: La debilidad mental del dependiente.
Divino, -na: 1. La Naturaleza. 2. Una obra de arte.
Divisa: Un pasaporte de oro.
Divisar: La prolongación del túnel.
Divisible: La mente humana.
División: El preámbulo de toda extinción.
Divisor: La naturaleza fractal de las matemáticas.
Divisorio: Las clases sociales.
Divorciar: Un acto doloroso.
Divorcio: Una dolencia del corazón.
Divulgación: El Vademécum del Ser Humano.
Divulgar: Una vocación y un sentido existencial.
Do: Un intangible musical asumible.
Dobladillo: Un recuerdo de juventud.
Doblaje: Una usurpación de personalidad.
Doblamiento: Pose vital de la clase trabajadora frente al capitalismo.
Doblar: Manipular el espacio.
Doble: Los niveles de la Administración Pública.
Doblegadizo, -za: El asalariado.
Doblegar: 1. El precio de la vida. 2. El Mercado.
Doblez: La marca de la contención.
Doblón: Una moneda romántica.
Doce: Un número demasiado religioso.
Docena: La cantidad perfecta de huevos.
Docente: Un ser social vilipendiado.
Dócil: Un hombre sin espíritu.
Docilidad: El estado esperado de la masa.
Docto, -ta: Un humanista en vías de extinción.
Doctor, -ra: Un salvavidas social.
Doctorado: Un premio a la tenacidad.
Doctorar: Alargar el período estudiantil.
Doctrina: Un saco de ideas.
Doctrinal: La Constitución.
Doctrinario, -ia: El Estado y el Mercado.
Documentación: Unas coordenadas de situación.
Documental: De lo poco bueno que emiten en televisión.
Documentar: Un proceso de investigación exigible.
Documento: Un papel cuya relevancia no viene dada por el portador sino por el destinatario.
Dodecaedro: La belleza del orden geométrico.
Dodecafónico, -ca: Una serie musical encorsetada.
Dodecágono: El complejo de un círculo con aristas.
Dodecaneso: El capítulo que separa al libro de occidente y oriente.
Dodecasílabo, -ba: Un verso modernista.
Dogal: El terror del reo.
Dogma: 1. La ceguera de la razón. 2. El aliento de la intolerancia.
Dogmático, -ca: Un fundamentalista.
Dólar: El poder hecho papel.
Dolencia: La incultura de la sociedad.
Doler: Vivir sin sentido.
Doliente: Una persona sin consciencia de su mismidad.
Dolmen: Un monumento magnético.
Dolo: Hacerse mayor.
Dolor: Una percepción de la que hay que huir.
Dolorido, -da: En ocasiones, mi orgullo.
Doloroso, -sa: La indiferencia del ser querido.
Doloso, -sa: El sistema de poder del Estado dentro del Estado.
Doma: La escuela para la carrera laboral.
Domador, -ra: La penuria.
Domar: Adiestrar el carácter ajeno.
Domeñar: Los impuestos y los tipos de interés bancarios.
Domesticar: Integrar el por favor como medio de autocensura.
Domesticidad: 1. El estado natural de la clase trabajadora asfixiada. 2. El sapo acostumbrado al agua hirviendo.
Doméstico, -ca: La intimidad.
Domiciliar: La trampa controladora de la comodidad.
Domicilio: Un hogar movible.
Dominación: Vivir dentro de la caja.
Dominador, -ra: El dinero.
Dominante: Un racista de estatus social alto.
Dominar: Controlar el racionamiento.
Domingo: Un día agridulce.
Dominguero, -ra: Un pobre que quiere sentirse libre por un día.
Dominical: Una constante periódica.
Dominicano, -na: Un isleño mestizo sin prisas.
Dominico, -ca: Un pedagogo fundamentalista.
Dominio: Una propiedad temporal.
Dominó: 1. El azar de la continuidad. 2. El síndrome del contagio.
Domo: La gran innovación romana.
Don: Un título de bachiller en desuso.
Donación: Un acto de generosidad o de egocentrismo.
Donador,-ra: Los inventores y los artistas.
Donaire: Un rasgo de nacimiento.
Donairoso, -sa: Se pueden contar con los dedos de las manos.
Donante: El activismo de la consciencia colectiva.
Donar: Desprenderse de un desapego.
Donativo: Una limosna para quien lo da.
Doncel: La vela de un caballero.
Doncella: Una esclava domesticada.
Donde: Depende del interés.
Dondequiera: El aire para respirar.
Dondiego: Una planta del jardín de mi madre.
Donjuán: Mi abuelo paterno.
Doña: La respetabilidad femenina entrada en edad.
Doquier, -ra: Espacio abarcable de la filosofía
Dorada: Al horno, sobre un fondo de patatas, cebolla y tomate, por favor.
Dorado, -da: El color del lujo.
Dorador: Un artesano de oro.
Doradura: En láminas muy finas, un comestible estético.
Dorar: Efecto que sufren los alemanes en la playa.
Dórico, -ca: La belleza clásica de lo estoico.
Dormida: La gente frente al televisor.
Dormidor,-ra: El inapetente de la vida.
Dormilón, -na: A medida que cumplo años, servidor.
Dormir: 1. Uno de los mayores placeres de la vida. 2. La evasión necesaria de la cotidianidad.
Dormitorio: Una dimensión mágica.
Dorsal: La importancia social de la numeración.
Dorso: La ambivalencia entre la parte trasera y la superior
Dos: Suficientes y nos sobramos.
Doscientos, -as: La relevancia de la cantidad.
Dosel: La diferencia del detalle ornamental.
Dosificador: Los presupuestos generales del Estado.
Dosis: El poder reafirmado de la calidad sobre la cantidad.
Dotación: Una estratagema de convicción y de camuflaje.
Dotado, -da: El favoritismo de la naturaleza.
Dotar: Buscar la mejora.
Dote: La compra del estatus.
Dovela: La fragilidad del equilibrio imposible.
Dracma: El conocimiento milenario mercantilizado.
Draconiano, -na: Las reglas excluyentes del Mercado.
Draga: Un aspirador de agua.
Dragar: Absorber.
Dragón: La belleza de la mitología.
Drama: Los apatrias de la guerra.
Dramático, -ca: La injusticia humana.
Dramatizar: Costumbre de una mala gestión emocional.
Dramaturgo: Un recreador de vidas ajenas.
Drástico, -ca: La avalancha de deberes escolares que privan la infancia y la juventud.
Drenaje: La redistribución de las rentas.
Drenar: Ajustar las proporciones.
Dril: La piel del verano.
Droga: Un alterador de consciencia.
Droguería: Un arsenal químico.
Droguero, -ra: Un farmacéutico doméstico.
Dromedario: 1. Un camello impar. 2. Un animal de otro mundo.
Drupa: El melocotón.
Dual: La mecánica cerebral.
Dualidad: El principio sobre el que se fundamenta la vida.
Dualismo: Allí donde tienen cabida los hombres de fe.
Dubitativo, -va: El filósofo, casi siempre.
Ducado: La sombra alargada de un noble.
Dúctil: Sin lugar a dudas, el ser humano.
Ductilidad: La sociabilización.
Ducha: El lujo cotidiano del primer mundo.
Duchar: (-se) Un placer convertido en adicción.
Ducho, -cha: Una capacidad poco valorada en la dictadura joven.
Duda: Razonable, siempre.
Dudar: Una virtud filosófica.
Dudoso, -sa: El principio de oportunidad real.
Duelo: La disputa entre lo que se piensa y lo que se siente.
Duende: Hoy en día habita en la informática.
Dueño, -ña: Un esclavista de las cosas.
Dulce: Un autoregalo festivo.
Dulcedumbre: Un estado de éxtasis de los sentidos.
Dulcemente: El entrante de la pasión.
Dulcera: La bruja de los niños.
Dulcería: Un paraíso goloso.
Dulcificar: Los políticos tratando de tontos a los ciudadanos.
Dulzaina: Un familiar de la flauta de toda la vida.
Dulzón, -na: 1. Los enamorados. 2. Los cachorros.
Dulzor: La prueba de la lengua.
Dulzura: Un comportamiento que desmonta.
Duna: Las olas del mar de arena.
Dúo: La riqueza de la suma.
Duodeno: El túnel de salida del estómago.
Duplicado: La segunda vida de un original.
Duplicar: Tener hijos.
Duplicidad: Un pose social excesivamente normalizado.
Duplo, -pla: Una progresión geométrica.
Duque: Un señor que suele vivir en el pasado.
Duquesa: Una señora que suele vivir estirada.
Duración: 1. Un espacio-tiempo acotado por singularidades. 2. Un suspiro de la vida.
Duradero, -ra: La falsa realidad.
Duramen: El esqueleto arbóreo.
Durante: Un tiempo a aprovechar.
Durar: Una cuestión de dedicación.
Dureza: La resistencia empoderada.
Durmiente: La consciencia humana.
Duro, -ra: Estado cerebral producido por la rigidez mental.